EDITORIAL /
El tema de la llamada Casa Gris de #JoséRamónLópezObrador, se ha convertido en una auténtica pesadilla para el presidente López Obrador. El reportaje que difundieron Mexicanos contra la Corrupción y Latinus, fue una bomba nuclear que estalló en Palacio Nacional.
De hecho, aún no se sabe con precisión cuantos heridos y muertos políticamente hablando, ocasionó el trabajo periodístico que mostró a gran escala el periodista Carlos Loret de Mola. Esto se convirtió en un escándalo a nivel mundial.
Pero el tema del hijo de López Obrador, dista mucho de llegar a su fin, y para echarle otro costal de sal a las heridas del Peje, ahora se sabe que el tema de la mansión de lujo en Houston, fue algo que salió desde las mismas oficinas de Presidencia.
Así lo confirmó el periodista Raúl Olmos, quien es director de la Unidad de Periodismo de Investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI). Según el reportero, el “tip” para el reportaje sobre dicha mansión, surgió desde la Presidencia de la República.
“El caso de la casa de Houston. ¿Cómo lo conocimos? Lo conocimos de una fuente dentro de la Presidencia, y qué bueno que lo escuche el gobierno federal, porque de adentro salió una pista que seguimos, y como decimos en el periodismo de investigación: esa fue la cola de la rata que tuvimos que jalar para encontrar y descubrir los elementos potentes de esta investigación.
“Y luego surgieron otros elementos periodísticos como el posible conflicto de interés y de ahí se van derivando otros, como la confesión que dio José Ramón acerca de que hay un vínculo entre él como empleado de los hijos de un contratista o empresario cercano al gobierno. Es decir, esa cola de la rata de la que jalamos nos está dando muchísima materia”, detalló Raúl Olmos en una nota que destacó la revista Proceso.
Esto pone en evidencias varias situaciones: primero, el presidente tiene al enemigo al interior de su gobierno; segundo, López Obrador, no tiene el control total de la información privilegiada que se maneja en sus propias narices.
Tercero, Andrés Manuel, dejó de ser intocable en Palacio Nacional, y esto podría sugerir que ni él está gobernando como lo hace suponer, y que alguien más le está “moviendo el tapete” para que caiga; y cuarto, la sucesión presidencial, ya derrumbó por completo al Peje.
El mal estado de salud del mandatario federal, también podría ser un factor que estén aprovechando varios personajes del gabinete obradorista y de la 4T en general. Es decir, ahorita ya todos defienden lo suyo…pero nadie defiende al presidente.
El caos en la Presidencia, dejará moribundo al proyecto de López Obrador.
Solo falta una última estocada, habrá que estar muy pendientes de esto.
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