EDITORIAL /
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), decidió -en los primeros minutos del jueves 30 de diciembre-, que el priista David Sánchez Isidoro, será el próximo alcalde de Coacalco para el periodo 2022-2024.
La alegría que desbordó Darwin Eslava hace unos días –cuando la Sala Regional de Toluca le dio el triunfo-, ahora se ha convertido en un enorme lamento. Esta derrota sin duda, marcará renacimientos y muertes políticas.
Sin embargo, hay un aspecto que retumbará en los muros de la 4T, en el suelo mexiquense. La derrota de Darwin Eslava, no solo fue en las urnas, sino también en la forma tan fallida en que se planearon las cosas.
¿Por qué no siguió Eslava Gamiño, con la enorme oportunidad de estar en el equipo de Daniel Serrano Palacios? ¿Quién lo asesoró para que esa unión se desbaratara? Aún más, ¿por qué Darwin permitió que se fracturara una relación que significaba mucho para él?
Serrano Palacios, es para muchos, uno de los estrategas políticos y electorales más importantes del país. El liderazgo y conocimiento de Daniel Serrano, traspasa fronteras, y no contar con su asesoría, es como cerrar un libro de sabiduría.
La foto donde aparece Darwin Eslava, junto con todos los alcaldes morenistas perdedores -apoyando las aspiraciones de Claudia Sheinbaum-, fue el preámbulo de su desgracia. ¿Adherirse al mafioso grupo de Higinio Martínez, fue una buena apuesta?
En fin, en el gobierno mexiquense y en todo el Estado de México, han de estar hasta burlándose de la estrategia que utilizó Darwin Eslava, para reclamar su triunfo. La caída de MORENA en Coacalco, tendrá muchas consecuencias, incluso incalculables.
David Sánchez Isidoro, trae la espada desenvainada.
¿Higinio los protegerá? El chiste se cuenta solo.
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