EDITORIAL /
La rebelión de Claudia Sheinbaum y Delfina Gómez Álvarez, en contra de Andrés Manuel López Obrador, podría estar en marcha.
Aunque puntualicen su lealtad al ex presidente de México, la actual mandataria federal y la gobernadora del Estado de México, operan como si fueran enemigas de AMLO.
En días pasados, Gómez Álvarez, destituyó a Paulina Moreno García de la Secretaría de Finanzas del Edomex. Esto en otro tiempo, no hubiera tenido ninguna repercusión.
Fuentes de Palacio Nacional y del Palacio de Gobierno de Toluca, indican que sí hubo repercusiones, porque Paulina Moreno, fue recomendada por Andrés Manuel López Beltrán.
Es decir que de nada le sirvió a Moreno García, ser la recomendada del junior. Esto jamás hubiera pasado en el sexenio del “Peje”, porque sus hijos, también gobernaban.
En caso de ser cierto -que tanto Claudia Sheinbaum y Delfina Gómez, operaron la destitución de Paulina Morena-, entonces hay señales reales de la extinción del obradorismo.
La Reforma Judicial de López Obrador, ha derrumbado a Sheinbaum; ahora Estados Unidos y Canadá, empiezan a hacerle el fuchi a México, consecuencia del atropello al Poder Judicial.
Será muy inteligente por parte de la presidenta de México, desmarcarse de López Obrador. Está visto que AMLO, solo sirve para destruir.
El que se haya marchado Paulina García de la Secretaría de Finanzas del Edomex, no es cualquier cosa. Le pegaron al “Peje” en donde más le duele: en las finanzas.
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