EDITORIAL /
Ricardo Salinas Pliego, presumió con bombo y platillo, la reunión que tuvo con el presidente de Argentina, Javier Milei. Habrá que imaginarnos, la cara que puso Claudia Sheinbaum, al observa la fotografía del dueño de TV Azteca y Banco Azteca.
¿Por qué no se fotografió Ricardo Salinas, con Sheinbaum? La respuesta es hasta lógica: el multimillonario mexicano, no confía en la presidenta de México, no cree en Morena, no cree en el gobierno federal, y odia a los socialistas y comunistas.
Razones no le faltan a Salinas Pliego, para aborrecer todo lo que representa Morena. El gobierno de la 4T, ha perseguido y exhibido a gran escala, al empresario mexicano. Más allá de que si debe o no impuestos, ya quisiéramos que López Obrador y Claudia Sheinbaum, persiguieran de la misma manera a los narcotraficantes.
Por eso Ricardo Salinas Pliego, busca países donde el desarrollo político, social y económico, se vislumbren. Desde que llegó Javier Milei a la Presidencia de Argentina, todo va viento en popa, y su crecimiento es tema a nivel mundial.
Qué tristeza y pena el observar cómo los multimillonarios mexicanos, tienen que irse a otros países, ante el caos que impera en México. El único empresario feliz con la 4T, es Carlos Slim; y eso porque el dueño de Telcel, recibe contratos de Palacios Nacional, y no tiene freno para exprime la economía de sus usuarios.
Ojalá tuviéramos más Salinas Pliego. Ojalá México, tuviera un Javier Milei.
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