EDITORIAL /
La caída electoral estrepitosa que sufrió Xóchitl Gálvez Ruiz, ha generado conmoción al interior del Partido Acción Nacional (PAN).
Nadie esperaba un resultado tan devastador, ya que muchos pensaban que Xóchitl Gálvez, podría darle buena pelea a la triunfadora, Claudia Sheinbaum.
Todos estaban equivocados, el triunfo de Sheinbaum, se convirtió en una masacre política para el PAN PRI y PRD. Con decir que el PRD, está a punto de la desaparición.
Es tanta la rabia y enojo por el resultado presidencial, que está trascendiendo la manera en que Marko Cortés, gritoneó a Gálvez Ruiz.
El periodista Carlos Loret de Mola, difundió que Marko Cortés, se enojó muchísimo con Xóchitl Gálvez, porque esta llamó a Claudia Sheinbaum, para felicitarla por su victoria.
“Cuentan los que estaban ahí que Marko Cortés le gritó a su candidata presidencial que cómo se había atrevido a felicitar a Claudia sin consultarle.
“Que él estaba planeando la estrategia de denunciar públicamente un megafraude. Xóchitl Gálvez —según las mismas fuentes— le contestó que ella era la candidata y ella decidía cuándo y cómo reconocer la derrota”, escribió Loret de Mola en El Universal.
Esto podría ser cierto, pues Xóchitl Gálvez, defraudó literalmente la confianza política del panista Marko Cortés, y del priista Alejandro Moreno Cárdenas “Alito”. El PRD, ya no cuenta.
Ahora se puede entender, por qué Xóchitl Gálvez, aceptó su derrota la noche del 2 de junio, y felicitó a Claudia Sheinbaum…y tres doritos después, dijera que va a impugnar la elección.
Sea lo que sea, la que perdió fue Xóchitl Gálvez, y tendrá que cargar con la pesada losa de la derrota, humillación, señalamientos, críticas y recriminaciones.
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